Es imposible calcular una fecha exacta de la creación de la primera herramienta manual. En algún momento del periodo neolítico (7000 a. C. y el 4000 a. C. aproximadamente) alguien utilizó una piedra pesada para dar forma a golpes, a una piedra de sílex (un mineral más blando y maleable) y así nació el primer mazo como herramienta básica. Este mecanismo manual es el más primario de todas las herramientas: el golpe, y a estas herramientas se les denomina herramientas de primera familia.


Los artículos más representativos de esta familia son un taco de madera con una piedra amarrada al extremo del mango (maza) y la clava. A partir de este mecanismo básico, la herramienta fue evolucionando hasta llegar a diferentes tipos de martillos. Actualmente, con la aplicación de energía mecánica por medio de diferentes mecanismos y fuentes de energía, llegamos al martillo neumático.   


La segunda familia de herramientas son las de corte. Sus principales representantes son la aguja y el punzón, los cuales eventualmente evolucionaron como cuchillos y sus variedades domésticas y militares (espadas, floretes, puñales, etc). también aquí podemos nombrar las tijeras, como una combinación entre dos cuchillos para utilizar su filo, así como la inclusión de dientes al filo de los cuchillos, para maximizar su efectividad, lo cual originó las sierras.